Bajo el alias de PLÀSI (“creación” en Griego antiguo) Mikael Bitzarakis lleva unos pocos años desgranando, con parsimonioso perfeccionismo, un escueto pero sólido cancionero imbuido de la mejor tradición folk anglosajona. Su obra, tan inmediata como adictiva, entronca con la de artesanos acústicos de poso melódico como José González, Nick Drake o Kings of Convenience. Cosa fina.